Tengo esta receta para publicarla desde hace mas de 3 meses y no se porque por una o por otra al final no sale, pero hoy me he dicho "Leila no puede ser", así que aquí estoy escribiendo el comienzo de la que espero sea una receta que os agrade y la preparéis muchas veces.
Los prepare para un reto, pero al final no llegue a tiempo de publicar la entrada y ahí se ha ido quedando, de verdad que estoy de un vago para editar las entradas... Buff espero que se me pase esta pereza pronto...
Bueno vamos con la receta...
Ingredientes:
- 100 g. mantequilla temperatura ambiente
- 5 cucharadas de azúcar
- 1 huevo
- 2 yemas
- 240 g. harina
- 3 cucharillas de levadura
- 1/4 cucharilla de sal
- 4 cucharadas de leche
- 1 yema para pintar
Mezclamos la mantequilla junto con el azúcar hasta que nos quede cremosa. Incorporamos el huevo y las dos yemas sin dejar de batir.
Tamizamos la harina, la levadura y la sal. Ir agregando poco a poco a la mezcla la harina, alternando con la leche.
Cuando este todo bien integrado, envolvemos la masa con un poco de film transparente y la dejamos unos 10 minutos en el frigorífico.
En la mesa de trabajo, enharinamos y estiramos la masa hasta que nos quede con 2 cm. de espesor. Tiene que quedar gordito. Cortar con un corta pastas o en su defecto con un vaso que la boca no sea grande.
En la placa de horno, ponemos papel de hornear y vamos poniendo todos los scones.
Cuando ya estén todos, batimos un poco la yema y pintamos los scones. Con un tenedor hacemos dibujos sobre la superficie.
Calentamos el horno a 180° y horneamos a esta temperatura durante 12 minutos.
Acompañamos nuestros scones con mermelada de frambuesa casera.
Besitos para ellas, saludos para ellos. Feliz semana